Diego Luciani y Sergio Mola buscaron encuadrar en delitos las maniobras que describieron durante ocho jornadas antes de pedir el lunes una condena. Negaron que exista lawfare.
Lo que dicen de vialidad en los medios
En el primer tramo de su exposición, el fiscal Diego Luciani insistió en vincular directamente al empresario Lázaro Báez con Néstor y Cristina Kirchner, y describió a los hechos como «la corrupción más grande» del país.
Incluso, su abogada dijo que irá a la Corte Interamericana de Derechos Humanos. No quiere una sentencia este año, sino el próximo en medio de la campaña presidencial para ponerse en "víctima" de una supuesta persecución.
El fiscal dijo que 30% de las obras con fondos nacionales otorgadas al empresario no pasaron por el Congreso, un argumento que busca poner toda la carga de los desvíos de dinero sobre el Poder Ejecutivo.
Tras el rechazo a la recusación que presentó la vicepresidenta, aparecieron pintadas y pasacalles.
En el caso de los fiscales, los tres integrantes del TOF 2, Andrés Basso, Giménez Uriburu, y Jorge Gorini suscribieron la decisión. Todas las defensas habían cuestionado la falta de objetividad de los fiscales y de dos de los jueces.
El Tribunal consideró que los reclamos "no resultan procedentes" y que el vínculo denunciado es "natural e inherente a un ámbito normal de trabajo".
El funcionario sostuvo que se lanzó una campaña en su contra y emparentó su pertenencia al mismo equipo de fútbol que el presidente del Tribunal, Rodrígo Giménez Uriburu, a un evento social o deportivo. Llamativamente, eludió en forma clara hacer alguna referencia a que jugaron en la quinta de Mauricio Macri.
En su descargo, Luciani sostuvo que el hecho de ser amigo con un juez no es causal de remoción. El abogado de CFK, Carlos Beraldi, anticipó que recurrirá a Tribunales superiores nacionales si se rechazan las recusaciones.
El defensor de la Vicepresidenta aseguró que los pedidos de apartamiento de los fiscales y los jueces buscan «garantizar que el juicio se desarrolle conforme a las reglas del debido proceso».
Carlos Beraldi, abogado de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, recusó al juez Gorini luego de que Página/12 revelara que mantuvo reuniones con Patricia Bullrich, una de las denunciantes originales de la causa por las obras públicas en Santa Cruz. Se suma a los planteos contra el fiscal Luciani y el juez Giménez Uriburu por sus partidos de fútbol en la quinta de Macri.
El defensor de la Vicepresidenta aseguró que los pedidos de apartamiento del fiscal Diego Luciani, del juez Rodrigo Giménez Uriburu y ahora de Jorge Gorini buscan «garantizar que el juicio se desarrolle conforme a las reglas del debido proceso».