A su vez, Suiza y Noruega están dentro del top 10 y 25 de comercio internacional, respectivamente. Suiza se destaca por el abastecimiento de suministros industriales, bienes de capital y bienes de consumo. Por su parte, Noruega se caracteriza por proveer combustible y suministros industriales.
Argentina posee un saldo de balanza comercial superavitario con el bloque, de aproximadamente USD 660 millones. Vende principalmente oro y plata en bruto (93%) y compra vacunas y antisueros (22%), y medicamentos (17%).
Fuentes diplomáticas argentinas afirman que el acuerdo con el EFTA no es relevante y marca la falta de acuerdos importantes que tendrá la cumbre. A simple vista, se observa un bloque liderado por Lula integrado por Brasil, Uruguay y Bolivia y uno en actitud disidente entre Argentina y Paraguay, sobre todo atravesado por las tensiones con Brasil
Otro de los acuerdos cerrados es la incorporación de 50 códigos con preferencia arancelaria para que el bloque negocie con otros países. Este tema generó dos reuniones extraordinarias de los Cancilleres que no llegaron a buen puerto porque los detractores exigieron que no se resienta la relación y el espíritu del bloque.
Argentina propuso aumentar de 100 a 150 el número de productos que pueden beneficiarse de reducciones arancelarias, buscando una eventual flexibilización de la política comercial y pensando en el acuerdo con Estados Unidos.
Brasil era el único país que faltaba dar el consenso y condicionó su apoyo a la propuesta, previa aprobación de su Cámara de Comercio Exterior (CAMEX). Finalmente, la potencia suramericana dio el visto bueno.
Fuentes que trabajan en el tema afirman que "en el Mercosur hay 100 productos que están acordados que tienen preferencia en Arancelaria y Argentina pidió 50 productos, los cuales Estados Unidos va a decir qué productos". "Es malo para Brasil y malo para la industria nacional", remarcan.
Sin embargo, fuentes diplomáticas argentinas afirman que el acuerdo con el EFTA no es relevante y marca la falta de acuerdos importantes que tendrá la cumbre. A simple vista, se observa un bloque liderado por Lula integrado por Brasil, Uruguay y Bolivia y uno en actitud disidente entre Argentina y Paraguay, sobre todo atravesado por las tensiones con Brasil.
Rubén Ruffi, el hombre de Karina para detonar los acuerdos en el Mercosur
En el caso paraguayo, la crisis se desató por las acusaciones contra Brasil por el espionaje ilegal en Itaipú que aún no se ha podido saldar mientras que con Argentina, la insalvable distancia está ligada a las diferencias ideológicas y la relación de Milei con el bolsonarismo.
En ese marco, la posibilidad de una visita de Lula a Cristina genera máxima tensión en una cumbre que deberá cuidar las formas para que Milei le entregue la presidencia protempore a Lula para el segundo semestre. No obstante, en el encuentro en el departamento de la ex presidente aún no fue confirmado porque se aguarda la autorización de la justicia.
En relación a Mercosur-UE, se espera un informe sobre el estado de los trámites internos en la Unión Europea, es decir, la pelota sigue del lado de los europeos.