Además celebró una resolución del juez Ariel Lijo que obligó a presentarse en Diputados a un ex funcionario clave para sostener la acusación.
Pese a que amenazó con recurrir a la fuerza pública para que declaren los testigos, a cuatro meses de iniciado todavía no pudo llevar a la comisión de Diputados a ninguno de los "reticentes".