El funcionario de Alberto Fernández y cara del Movimiento Evita evitó polemizar con el líder de La Cámpora. "No me ofendo", dijo y dejó un mensaje de la crisis: "La culpa es de la política, pero también de los grandes grupos económicos".
Aunque los militantes bajaron sus banderas y se retiraron del predio, las organizaciones sociales lo negaron.
El líder de La Cámpora usó su renuncia a la presidencia del bloque oficialista en Diputados y recordó que antes de hacerlo público habló con Alberto Fernández.