El magistrado ratificó su competencia en una causa en que investiga sobreescrituras en los textos que escribió Oscar Centeno, el ex chofer de Roberto Baratta. Y luego dispuso medidas de prueba.

Pese al reclamo del Tribunal Oral Federal 7, que pretendía detener la pesquisa sobre las tachaduras y enmiendas en las anotaciones del exchofer Oscar Centeno, Martínez de Giorgi confirmó que seguirá investigando la
manipulación de las anotaciones sobre las que se basan las acusaciones por supuestas coimas. El juez remarcó que «varias irregularidades» ya «pudieron
corroborarse», al igual que su autor, Jorge Bacigalupo. En las últimas horas, el magistrado ordenó
rastrear las llamadas del expolicía y analizar si borró contenido de sus teléfonos y su computadora.

El tribunal oral federal 7 pidió al magistrado de instrucción que frene con la causa porque pruebas como las reclamadas por un empresario se deben debatir en el juicio oral en que está procesada Cristina Kirchner.