Yaquelin Rina Murga, expareja de Carrizo, declaró como testigo en el juzgado de Capuchetti e hizo crecer el interrogante sobre la posible existencia de instigadores para matar a la vicepresidenta. La mujer relató que, meses atrás, le reclamó al líder de Los Copitos por el monto insignificante que abonaba por cuota alimentaria -tienen un hijo de cuatro años- y el ahora detenido le confesó que estaba por entrar a una actividad que le iba a pagar muy bien. «Ahora entiendo el negocio sucio», narró Rina Murga.

Son el jefe de la banda y una de las amigas de Brenda Uliarte. Los acusan de haber participado de la planificación del ataque.
También fue procesada Agustina Díaz, otra integrante del grupo. La jueza Capuchetti los acusa de ser partícipes secundarios de homicidio calificado en grado de tentativa.
El pedido es para que la jueza Capuchetti cite a Sergio Orozco, otro de los miembros del grupo que lideraba Gabriel Carrizo y del que formaban parte Sabag Montiel y Brenda Uliarte.
Lo decidió la Cámara Federal y le denegó la libertad, un pedido que había hecho la querella de la vicepresidenta.
Tomás Méndez dijo que se presentó ante una fiscalía y entregó su teléfono para que se determine el alcance de esas relaciones. Negó haber participado del intento de ataque a Cristina Kirchner o del supuesto "armado" de atentado.
La Vicepresidenta lo dijo durante su alegato final de defensa en la causa Vialidad.
La ex titular de la AFI consideró que Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte cometieron un "acto terrorista", no un intento de asesinato agravado.