El radicalismo celebró los 39 años del triunfo de 1983 con una actividad que desbordó en liturgia alfonsinista y defensa de la identidad partidaria. La foto más simbólica, sin embargo, no fue la radical.
El radicalismo celebró los 39 años del triunfo de 1983 con una actividad que desbordó en liturgia alfonsinista y defensa de la identidad partidaria. La foto más simbólica, sin embargo, no fue la radical.